martes, octubre 25, 2011

Te echo (de menos)

Pasó recién y fue cuático. Vi unas fotos de un carrete, el mejor al que he ido.


Acabo de leer un post de Wilicer que dice (Mellamo) Sebastián pero quedé metida con sólo el (MELLAMO) porque suelo hacer conexiones de cosas que veo/escucho con personas con las que hablamos/no-hablamos. Y me dio lata. Como que te echo de menos, oye. Y la conexión un poco más rebuscada la consigue Portishead en su presentación en Roseland, NYC. Me imagino música, eh. Con ondas, como si cayeran paños de seda con el ritmo de la música. Y veo colores. Colores fuertes y que me gustan. Como ese día cuando me dieron de probar cogollo (no estoy segura que era ni si lo supe fumar, probablemente no) y con el efecto de la luz verde semáforo y esa cosa que tenía un sabor raro, me hicieron ver todo verde y luego fucsia. Pero con cuática. Y me sentí bien y así me sentía antes. Ahora no.

También soñé con una tarde-noche muy linda y toda amorosa. Porque soy empalagosa y cargante. En mi mente, eso sí. Porque no dije nada cuando podría haber dicho algo. Igual tus directas-indirectas me dejaron pa la cagá. No lo niego. Te fuiste al chancho. Acéptalo. Ya no te quiero. Nunca te quise. Basta del oscuro y vamos de nuevo echándote de menos.